La Ciudad de Panamá fue seleccionada en el año 2016 en el tercer grupo de ciudades del programa 100 Ciudades Resilientes (100RC, por sus siglas en inglés).
Es la única ciudad en Centroamérica que forma parte del programa, por lo que servirá de modelo para otras ciudades de la región en el desarrollo de acciones enmarcadas en la resiliencia. Además, su singular posición geográfica la ubica a lo largo de su historia como principal paso transístmico en la región y como interconector entre dos océanos, una localización preferida por diversas organizaciones internacionales que operan en la región.
Como paso inicial, la Ciudad de Panamá ha llevado a cabo una serie de actividades para establecer la fundación y dirección futura de su estrategia de resiliencia.